Su energía vital transmite fortaleza y alegría, esa que traspasa la pantalla de las computadoras y las redes sociales cuando publica videos graciosos o cuenta a través de éstos algún cuento a sus seguidores, muchos de ellos artistas, escritores, periodistas y maestros.
Aunque es consciente de que la gente lo quiere y lo sigue en el mundo virtual, Alejandro De la O, actor, docente de teatro y gestor cultural cordobés, prefiere el contacto cara a cara, el convivio que ofrece el teatro en cada función, el contacto con el público durante y después de cada espectáculo.
“Si bien hago muchas cosas, me defino como actor. Si pensamos en un árbol como una metáfora, mi tronco es lo actoral, mi ser actor. Las ramas son el resto de las cosas que amo hacer como difundir literatura, enseñar a los chicos en el aula, trabajar para diferentes organizaciones en acciones sociales para concientizar sobre la diversidad sexual, cultural, la tolerancia, entre otras cuestiones de las cuales soy militante”, explica Alejandro.
Hace casi 20 años este actor de teatro para jóvenes audiencias forma parte de Grupo Egos teatro para niños, y hace más de una década también es maestro de teatro. En sus clases inculca a los chicos el amor por la literatura, presentándoles autores nacionales y latinoamericanos para que ellos sepan de su existencia y descubran nuevos mundos posibles.
Alito, como le dicen muchos, difunde la palabra, la literatura, sobre todo la infanto-infantil. “Yo me siento cómodo en ese terreno, es el que más me gusta y me entusiasma. Le veo infinitas posibilidades, una fuente inagotable de creatividad”, asegura el actor.
Y continúa convencido: “Soy alguien que indaga, explora y hurga en la literatura y música para niños. Todo lo que tiene que ver con ese mundillo”.
Laura Escudero, escritora cordobesa, autora de la novela «Encuentro con Flo» entre otras obras, le dijo que era un “convidador de historias” y a Alejandro esa definición le encantó. “Yo me siento así y me gusta recomendar libros y autores”, confiesa.
Alejandro es gesto cálido, mirada chispeante, abrazo sincero. No conoce otra forma de relacionarse cuando se encuentra con quien aprecia. “Soy así, demostrativo, me gusta tomar contacto con la gente y cuando no me nace de ese modo simplemente me resulta muy difícil establecer una relación”.
Quizás sea por eso que se gana la confianza, el cariño y la ayuda constante de personalidades del mundo cultural para llevar a cabo sus propias iniciativas.
Manos a la obra
Este año, junto al equipo de trabajo Postales de Pickwik ,que se dedica al fomento y la investigación de la literatura para niños y jóvenes en la provincia de Córdoba, organiza el segundo Congreso Nacional e Internacional de Literatura Infantil y Juvenil. Este se realizará del 6 al 8 de junio en Centro Educativo Tecnológico ATILRA de Sunchales, Santa fe.
Además, el actor participa de Aquelarre, una revista especializada en literatura infantil y juvenil , donde escribe una columna desde su experiencia como lector avezado. “Entre tanto artículo académico, lo mío es un aporte más desde lo emocional y el vínculo con la historia desde la mirada del lector”, detalla.
Otro de los eventos importantes que Alejandro organiza junto a diversas organizaciones, es la Feria barrial del libro infantil juvenil de la Red cultural Zona norte, en la ciudad de Córdoba. Es una feria itinerante que ya tiene siete ediciones y que se realiza cada año en una de las escuelas que participan.
A Alejandro lo mueven fuertemente sus ideas y convicciones y milita por ellas. “El año pasado hice algo muy lindo. Fui convocado por la secretaría de Derechos Humanos y Diversidad de la UEPC (Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba) para participar de las jornadas de ESI, educación sexual en las escuelas. Estuve con alumnos, con docentes, fue maravilloso, me mueven mucho esos temas”.
Relación con los escritores
Su carisma y pasión por la literatura lo han llevado a entablar una fructífera relación con escritoras y escritores cordobeses y de distintas partes del país, a quienes invita a ferias del libro que organiza, a conversatorios y otros eventos, todos vinculados a los lectores jóvenes.
Incluso, el actor recibió el Premio Nacional y Latinoamericano de Literatura Infantil y Juvenil La Hormiguita Viajera por su trabajo en la difusión y el fomento de esa literatura.
“Con ellos se da un ida y vuelta, es algo que se produce naturalmente. La que me abrió la puerta con fue María Teresa Andruetto, una genia, gran amiga y a quien admiro, pero luego no hizo falta nombrarla para solicitarles material, entrevistas o colaboración para diferentes cosas”, expresó.
La motivación de establecer un vínculo con escritores y también con ilustradores, tiene que ver con enriquecer su trabajo en la escuela pública. “La idea es que mis alumnos conozcan más de autores, ilustradores. Les pido que vengan a charlar con los chicos en diferentes instancias. Busco que se sientan como reyes, los cuido lo máximo posible y que la pasen lindo. Vienen y se encuentran con lectores que conocen muy bien sus libros. En la escuela hacemos un trabajo a conciencia. Hace poquito vino Mercedes Pérez Sabbi, y firmó mil libros, se tomó el tiempo para hacerlo, fue impresionante”.
El teatro para chicos de la mano de Egos
Grupo Egos es un capítulo muy importante de su vida profesional y personal. Los integrantes del grupo son sus colegas pera también sus amigos de la vida. En el colectivo artístico, trabajo y amistad se entrelazan.
“Mi labor en Egos ha ido mutando a lo largo de estos casi 20 años, incluso nosotros también fuimos cambiando. Tanto Cecilia Di Marco como yo estamos en el lugar que queremos estar. Te menciono a ella porque somos los que siempre estuvimos fijos en el grupo. Hoy, con nuestro grupo, hacemos lo que tenemos ganas de hacer. Esa fue una decisión por la cual no estrenamos una obra el año pasado. Incluso la crisis también fue un condicionante”.
El artista contó que hacer “Malas palabras” de Perla Szuchmacher también fue para él un antes y un después. “Fue un desafío, un unipersonal donde puse lo mejor de mí, y hablé de un tema tabú. Un quiebre que me llevó a querer hacer otras cosas”.
En este 2019 Egos estrenará en mayo “De pronto, crash”, una obra de dramaturgia propia que habla sobre los vínculos humanos. “Yo en esta obra no voy a actuar porque vengo de hacer malas palabras. Igualmente se viene la obra de 20 años de Egos donde actuaremos todos, dirigidos por Gastón Mori, aunque eso está en proceso”.
Próximos desafíos en la escena teatral
Para esta temporada teatral, Alejandro está organizando junto a la artista Natalia Moya una coproducción entre Postales de Pickwik (grupo que ella también compone) y grupo Egos. La idea es trabajar sobre el cuento “Historias de un pulóver azul” de Florencia Gattari. La obra aborda aquellas cuestiones esenciales como la vida y la muerte en torno al crecimiento de un niño y su relación con quienes lo aman y cuidan, especialmente su abuela.
“Quiero hacer un unipersonal dirigido por Natalia Moya con ese libro que amo”, adelantó el actor.
Palabras claves
Niños y niñas: “Son importantes en el hoy y no hay que pensarlos en función de alguien que va a ser un adulto. No sabemos qué van a ser en el futuro, lo clave es darles lo mejor hoy por sus derechos y para que sean felices”.
Teatro y literatura para chicos: “Me dispara la posibilidad de muchos mundos posibles, es un mundo inagotable que habilita metáforas creativas”.
Una pasión: “Leer y comprarme libros, no con una actitud consumista o catedrática, sino por las ansias de conocer y descubrir otras realidades”.
Me enoja: “No tranzo con ciertos temas como la defensa de la derecha en el mundo, y todo lo que vaya en contra de la diversidad sexual. Cuando se meten con los pobres y los señalan injustamente, con campañas como Con mis hijos no te metas, dado que la ESI es fundamental en las escuelas. Soy muy creyente, pero no me gusta cuando en nombre de Dios se cometen atrocidades.
Objetivo a futuro: “Quiero publicar un libro. Estoy trabajando por eso”.
